Alerta No. 100-2019
Comité por la Libre Expresión (C-Libre).- La periodista Sandra Maribel Sánchez denunció un nuevo atentado contra su vida, ocurrido la tarde del jueves anterior, frente a su casa de habitación, en Tegucigalpa.
Por lo que el viernes 27 de octubre, en conferencia de prensa ofrecida en las instalaciones de Radio Progreso, en la capital, Sánchez narró que un hombre le apuntó con una pistola calibre 9 milímetros, mientras ella se bajaba su automóvil y se disponía a recoger su computadora.
Sánchez ligó la reciente acción contra su vida “a una serie de denuncias que yo he hecho en las últimas semanas directamente dirigidas a miembros de la Secretaría de Seguridad y también de las Fuerzas Armadas de Honduras”.
La acción fue frustrada por un vehículo que se estacionó del otro lado de la calle, y abrieron la puerta «pensó que venían conmigo», añadió. En la misma linea, describió al sujeto que le tenía encañonada con un cuerpo con lenguaje y señales de su cuerpo de un militar, mismo que huyó en una moticicleta sin placas.
Junto a este hecho, existe una serie de sucesos ocurridos en los últimos dos años y que está ligado estrictamente a mi ejercicio profesional, detalló la periodista Sandra Maribel Sánchez, quien dirige el espacio de debate “Más que Dos”, transmitido desde Tegucigalpa, por Radio Progreso.
“Yo voy a seguir haciendo el periodismo que he hecho hasta hoy. Cosas como estas me hacen reafirmar la convicción de escoger esta profesión no para hacerle relaciones públicas a ningún gobierno ni a ningún grupo de poder, escogí el periodismo para contribuir a la transformación de mi país que nos están robando poco a poco”, puntualizó Sánchez.
El espacio fue oportuno para hacer un llamado a los y las colegas periodistas de la siguiente manera “asumamos el gran reto que tenemos en un momento histórico como este, de denunciar todas las arbitrariedades que se cometen el país para finalmente recuperar un poco de lo que antes teníamos, que no era lo mejor”.
La periodista fue acompañada en la conferencia de prensa por el director de Radio Progreso, el sacerdote jesuita Ismael Moreno y por el Área Legal del Comité por la Libre Expresión, Mario Rojas.
Moreno consideró que el hecho ocurrido el día jueves, corresponde no solo a una amenaza, sino que lo califica como un atentado, un intento de asesinato o de secuestro contra la comunicadora.
“Soy hondureña, aquí me quiero quedar, no me quiero ir ni siquiera en una situación como esta”, expuso la periodista, con más de 30 años de trayectoria profesional en diferentes medios de comunicación del país.
Detalló que, tras el suceso llamó a Moreno y lo puso al tanto de una serie de incidentes más que han ocurrido, haciendo una lectura del momento lo que pasa en el país. Es así que, ni al director de la emisora ni a la periodista les queda duda de dónde proviene la fuente de la amenaza “que pudo convertirse en otra cosa si no es por la suerte de que narré”, según las palabras de Sánchez.
La Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los derechos Humanos en el país (OACNUDH), expresó su apoyo y solidaridad hacia la periodista y sus familiares. Además, llamó a las autoridades correspondientes a “desarrollar una investigación exhaustiva del atentado criminal sufrido por la periodista y defensora”.
Organizaciones nacionales e internacionales, han hecho llamados a las autoridades hondureñas para que investiguen diferentes hechos de violencia contra el equipo de prensa y el director de Radio Progreso.
La Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión, en su numeral nueve, expresa que, acciones como asesinato, secuestro, intimidación, amenaza coarta severamente la libertad de expresión.
“Es deber de los Estados prevenir e investigar estos hechos, sancionar a sus autores y asegurar a las víctimas una reparación adecuada”, cierra el numeral.