Alerta 040-2017

Comité por la Libre Expresión (C-Libre). Jóvenes integrantes de la Barra “Ultrafiel” del equipo de futbol Club Deportivo Olimpia, denunciaron que existe una política de Estado para vender seguridad mediante el abuso de poder, la utilización desproporcionada de la fuerza y tratos crueles inhumanos y degradantes.

La denuncia fue realizada ante C-Libre el día (4 de abril de 2017) por representantes de la “Ultrafiel”, en consecuencia de la paliza propiciada por elementos de la Policía Militar de Orden Publico (PMOP), al joven Ángel Martínez en el marco de la realización de un encuentro futbolístico en el Estadio Nacional Tiburcio Carias Andino de la ciudad capital de Honduras, el pasado domingo dos de abril alrededor de las 3:00 pm.

De acuerdo a las declaraciones de los denunciantes, Martínez intento calmar la situación al acercarse a los uniformados y pedirles prudencia pues estaban repartiendo “golpes, patadas y toletazos” a todo el que se cruzara por el sector.

“Ángel intento el dialogo pero fue agredido por al menos  10 policías durante un aproximado de tres minutos, según se aprecia en el video que circula en las redes sociales. Lo soltaron hasta que se desmayó y acto seguido comenzó a convulsionar en consecuencia de los golpes propiciados por los policías”, detallaron los jóvenes.

Las imágenes del video referido muestran a agentes de la PMOP golpeando al joven a quien dejaron tirado en la calle  convulsionando y sin prestarle ningún tipo de ayuda.

Según lo manifestado por los denunciantes este tipo de prácticas es recurrentes por parte de la policía a quienes incluso se han captado disparando a quema ropa en contra de los integrantes de la “Ultrafiel”.

El artículo 3 de la Convención Interamericana de Derechos Humanos estipula que: Para los efectos de la presente Convención se entenderá por tortura todo acto realizado intencionalmente por el cual se inflijan a una persona penas o sufrimientos físicos o mentales, con fines de investigación criminal, como medio intimidatorio, como castigo personal, como medida preventiva, como pena o con cualquier otro fin. Se entenderá también como tortura la aplicación sobre una persona de métodos tendientes a anular la personalidad de la víctima o a disminuir su capacidad física o mental, aunque no causen dolor físico o angustia psíquica.

Por su parte a través de un comunicado del día 3 de abril de 2017, La Secretaria de Seguridad  comunico que “se ha ordenado identificar los policías participantes en esta acción suspenderlos del servicio policial, continuar la investigación a través de la Inspectoría General y la Dirección Policial de Investigaciones, DPI, y en caso de comprobar responsabilidad administrativa o penal se aplicará la sanción respectiva”.