La Coalición contra la Impunidad (CCI), integrada por más de 45 organizaciones de Sociedad Civil, que velan por la defensa y promoción de los derechos humanos, frente al contexto de represión, persecución y violencia desatada por el régimen de Juan Orlando Hernández, a la opinión pública nacional e internacional hace de su conocimiento lo siguiente:
1. Que valoramos positivamente la respuesta del pueblo hondureño, convocado a movilizarse por la defensa y exigencia de sus derechos a la salud y la educación; movilizándose en más de 70 puntos geográficos a nivel nacional, como respuesta a los reiterados abusos del régimen que sigue los lineamientos de los organismos de crédito internacional.
2. La intensa jornada de represión dejó al menos ocho personas detenidas, entre ellas, tres universitarios que fueron víctimas de tortura en la celda policial de El Manchén; tres menores de edad de 14, 16 y 12 años, retenidos ilegalmente en la sede de la Jefatura Metropolitana N° 1; y al menos tres personas gravemente heridas ingresadas al Hospital Escuela Universitario (HEU).
3. Condenamos la represión desatada en contra de las expresiones populares, que ven sus conquistas gremiales mermadas gradualmente, en detrimento de una nación empobrecida.
4. Consideramos que las últimas acciones llevadas a cabo por el Poder Legislativo, dominado por el Partido Nacional para aprobar los decretos de Reestructuración de la Salud y Educación, así como sus modificaciones, constituyen una flama que podría ser el inicio de una convulsión social sin precedentes y de consecuencias impredecibles.
5. Denunciamos la estrategia de infiltración que, reiteradamente se ha producido durante las movilizaciones pacíficas y voluntarias de la ciudadanía hondureña, donde se observan personas con características físicas militar-policiales y armados, con el claro objetivo de intimidar, causar daño, perfilar dirigentes e incluso llegar al extremo de asesinar a personas en el ejercicio de su libertad de expresión. Lo anterior quedó evidenciado con la intervención armada de un miembro de la Policía Municipal del Distrito Central, cuya actuación fue grabada y divulgada ampliamente en medios de comunicación y redes sociales.
6. Condenamos enérgicamente los ataques con bombas lacrimógenas perpetrados el lunes 29 de abril por elementos de la Policía Antimotines contra la sede Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH). Una acción que remonta a los sistemáticos ataques perpetrados a organizaciones de derechos humanos producidos en 2009, durante el golpe de Estado.
7. Acuerpamos las demandas del pueblo hondureño que este 1 de mayo, Día Internacional del Trabajo, se moviliza con la esperanza del respeto a la vida, la integridad humana, el retorno la democracia y el Estado de Derecho.
Tegucigalpa, MDC, 30 de abril del 2019