El Progreso, Yoro (C-Libre). Los reporteros de Radio Progreso, nuevamente fueron objeto de obstrucción a su labor informativa por parte de varios elementos de la Policía Nacional, mientras los comunicadores sociales Cesar Obando Flores (26), y Gerardo Chevez (40), intentaban dar cobertura mediática a un desalojo que se llevaba a cabo contra el grupo campesino Agua Blanca Sur, en la comunidad de Guanchías, en el municipio de El Progreso, en el departamento de Yoro.

Obando Flores comunicó al equipo técnico del Comité por la Libre Expresión (C-Libre), que al momento de intentar ingresar con su compañero de labores para dar cobertura informativa al desalojo en la finca 11, en el sector sur de El Progreso, los uniformados no les permitieron el paso, únicamente argumentando que estaba prohibido el acceso a la prensa.  

“Nosotros ayer (martes 12 de diciembre), hicimos también a través de nuestras redes sociales la denuncia, porque resulta que ya es la tercera ocasión (que les impiden realizar su ejercicio periodístico), y también fuimos a poner la denuncia al CONADEH (Comisionado Nacional de Derechos Humanos), entonces esperamos que se haga algo”.

Por su parte, Inmer Gerardo Chevez, señaló durante el momento del desalojo a través de una transmisión en las redes sociales de Radio Progreso, que “Estamos tratando de dar cobertura, sin embargo, la policía, ha impedido nuestros transito sin presentar ningún tipo de argumento, para que nosotros no podamos llegar allá donde se está llevando el desalojo”.

El comunicador social pormenorizó que cuando las autoridades por algún motivo no permiten el ingreso a la prensa para que desarrolle normalmente su labor informativa, impiden también el derecho a la libre expresión y a la libertad de dar cobertura mediática a estos sucesos.

“No entiendo que tratan de encubrir, cuando impiden el paso a la prensa, impiden la libertad de expresión, la libertad de cobertura y no presentan ningún argumento”, señaló Chevez, mientras detallaba que en la zona dónde no se les daba acceso, estaban los policías con tanquetas realizando el desalojo de varias familias campesinas.

Cabe resaltar que el pasado 30 de octubre, el reportero Cesar Obando Flores, también fue sujeto de agresión de parte de varios miembros policiales, cuando intentaba entrevistar a una de las víctimas de un desalojo en la comunidad Brisas del Guaymón, ubicada en la aldea el Guaymón en El Negrito, departamento de Yoro.

En ese momento, Radio Progreso, colgó en sus redes sociales, una publicación lamentando que el hecho suscitado niega el derecho que como periodista tiene Flores, a ejercer la labor de comunicar e informar y constituye un atropello a la libertad de prensa y de acceso a la información desde el lugar de los hechos.

La Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras (RNDDH), dio a conocer por medio de sus redes sociales, que este pasado martes 12 de diciembre, “Los miembros de la Policía Nacional llegaron con 30 patrullas y 2 tanquetas a ejecutar un desalojo en la comunidad de Guanchías, El Progreso, a favor de la Empresa Azunosa”.

Asimismo, denunciaron la situación que enfrentan sus compañeras y compañeros de la Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC), “frente a esta política de despojo, hostigamiento y estigmatización contra la lucha campesina”.

“Exigimos al gobierno que detengan los desalojos contra quienes siembran y cosechan su legítima tierra. Alertamos al pueblo hondureño y especialmente a organizaciones de Derechos Humanos para seguir pendientes de la situación que enfrentan los defensores y defensoras del país”, demandó La Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos en Honduras.

El Comité por la Libre Expresión, reitera ante esta nueva obstrucción a la prensa nacional, que la Ley de Libre Emisión del Pensamiento en Honduras cita que «Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento y expresión. Este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas, ya sea oralmente, por escrito, o a través de las nuevas tecnologías de la información, el cual no puede estar sujeto a censura previa sino a responsabilidades ulteriores expresamente fijadas por la ley.»