El Progreso, Yoro (C-Libre).- Erick René Pineda López (23) comunicador social de Radio Progreso fue sujetado fuertemente del cuello e inmovilizado por miembros de la Policía Nacional quienes también a empujones lo expulsaron de las inmediaciones de la comunidad Agua Blanca Sur impidiéndole hacer la cobertura informativa de un desalojo de un grupo de campesinos y campesinas aglutinados en el Movimiento Sin Tierra (MST).

En un video difundido en la redes sociales de Radio Progreso se observa que unos agentes de policiales se aseguran que Erick López se aleje del lugar en donde acontece el desalojo, según relato del comunicador social, uno de los funcionarios policiales es quien le agredió sujetándole del cuello mientras transmitía en vivo para el noticiero matutino de Radio Progreso, información que tuvo que interrumpir abruptamente debido a la agresión que ese momento era objeto por parte del funcionario policial. .

«Hice mi ingreso en la zona debidamente identificado con mi chaleco y el carnet de la radio y cuando estaba transmitiendo en vivo, unos cinco agentes me rodearon, uno me tomó fuertemente del cuello y otros me empujaban para que no transmitiera el desalojo», comentó este comunicador social, al equipo técnico del Comité por la Libre Expresión (C-Libre).

De la entrevista con Erick ahora sabemos que al menos unas 150 familias que desde hace dos años habitaban ese lugar conocido como Agua Blanca Sur y que pertenecen a la Cooperativa de Campesinos y Campesinas llamado Movimiento Sin Tierra, del departamento de Yoro. Asi mismo, según este comunicador social quien hace siete años forma parte del equipo periodístico de Radio Progreso «la orden de prohibir el ingreso de los medios de comunicación emanó directamente del Juez ejecutor del desalojo», asi lo dijeron los policías mientras lo retiraban del sitio, acotó.

Al momento de la agresión policial, sus compañeros en cabina condenaron la agresión y denunciaron públicamente la obstrucción informativa y violación a la libertad de prensa y libre expresión de la era victima su compañero de labores en la zona donde cientos de hombres, mujeres, niños, niñas, jóvenes, adultos y persona de la tercera edad, eran despojados a la fuerza de sus hogares y que debido a la represión informativa se desconocía detalles del acontecimiento.

Mientras tanto los responsables de las redes sociales de este medio de comunicación de zona norte de Honduras, posteaban en las redes social como un informe de último minuto. «ÚltimoMinuto La Policía Nacional agredió al comunicador de Radio Progreso, Erick Pineda, mientras intentaba cubrir el desalojo de un grupo campesino en la zona sur de El Progreso, Yoro. Un agente policial tomó por el cuello a nuestro compañero y lo empujó, obligándolo a salir del área donde la población campesina está denunciando los abusos policiales» fue el mensaje que alertó a las organizaciones de derechos humanos, respecto de la agresión contra la libertad de prensa y Libre Expresión.

«Es lamentable que la Policía Nacional sigan con este tipo de actuaciones cuando uno sólo trata de informar y no piensa intervenir en las labores que realizan», sostiene Erick y añade que desde Radio Progreso siempre se procura informar, en este caso, la forma como se están desarrollando los hechos en torno al desalojo, concluyó este comunicador social.

Cabe señalar que al lugar se hicieron presente otros medios de comunicación y que de igual forma se les impidió hacer la cobertura informativa de los acontecimientos.

María Teresa Torres, Directora Ejecutiva de la Organización del Pueblo Indígena Nahua de Honduras (OPINAH) considera que en varias zonas del país la situación está complicada debido a los desalojos de campesinos y campesinas de sus tierras «el llamado a las autoridades es que hagan las investigaciones del caso y evitar este tipo de proceso pues sabemos que las personas han vivido en sus tierras por muchos años y por lo tanto les asiste un derecho», dice Teresa Torres. Y agrega que «todos sabemos que la empresa privada tiene grandes intereses en varias zonas del país y en este caso de la zona sur de Yoro, por lo tanto las autoridades de gobierno deben considerar abstenerse de realizar estos desalojos porque violenta los derechos humanos de muchas familias campesinas». apunta Torres.

Debido a la presión mediática que produjo la presencia de otros medios informativos, los agentes policiales y miliares no pudieron impedir que el registro audiovisual del desalojo quedará en el desconocimiento de la población, quienes a través de las redes sociales condenaron el hecho.

C-Libre recuerda a las autoridades policiales y militares que el acceso a la información representa una herramienta importante que permite a la población además de expresarse generar procesos que facilitan a la ciudadanía tener acceso a la justicia. De igual manera la libertad de prensa y libre expresión son imprescindibles en el desarrollo y crecimiento democrático de los pueblos.